Tantas cosas que a diario pasan por mi mente. Tantas ideas desperdiciadas. Tantos textos que van a parar al limbo de lo nunca escrito. Quisiera ser una persona disciplinada y poder escribir siquiera un párrafo diario, quisiera detenerme siquiera un par de minutos a escribir una frase, pero no puedo. El mundo en el que vivo es demasiado absorbente. El trabajo -en el que irónicamente a veces no hay trabajo- dura todo el día, cuando salgo solo quiero abrazar, besar, dormir, ver un poco de televisión y leer. Cuando tengo tiempo libre las ideas se me escapan y termino navegando por páginas que anuncian concursos literarios en los que irremediablemente no participaré por mi falta de productividad.
A veces pienso que el problema es que tengo tantas cosas en la cabeza que no termino de ordenarlas y definir las prioridades.
Quizá un día en el fondo de este baúl termine encontrando todas esas historias no contadas y la paz literaria llegue al fin.
Consigue una libreta pequeña que puedas llevar en tu bolsa. Si se puede hasta en un bolsillo. Que sea de espirales para que puedas doblarla cómodamente y escribir sobre tus piernas si hace falta.
ResponderBorrarSi está en tus posibilidades, llévalo al siguiente paso: hay nuevos celulares con teclado externo.
Si el Internet te distrae, vete a lo seguro con la libreta.
Así podrás escribir donde quiera que estés.
Muchas gracias por tu consejo, Chumina. Lo tendré muy en cuenta, sobretodo porque cuando niña tenía esa costumbre.
ResponderBorrarUn saludo!